Los pendones son banderas utilizadas como distintivo desde la Edad Media. Su forma más habitual es corneta (cuadrada y farpada) o redondeada. Su origen es militar. En la Edad Media la organización de los ejércitos no incluía tan si quiera uniforme y el pendón permitía identificar a las mesnadas en la lucha. Inicialmente era una bandera militar sobre una lanza pero con el tiempo fue ganando altura para mejorar la visibilidad. Desde el siglo XVII comenzaron a ser inútiles para las batallas y se utilizarían como un distintivo en ceremonias y representaciones del poder local. Su uso también se integró en representaciones religiosas, romerías y fiestas locales.
Este distintivo local en el que cada municipio tiene su representación con diferentes listas de colores muy llamativas se está recuperando como parte de muchas fiestas locales. Ahora se pueden ver en las justas de Hospital de Órbigo, en la procesión de nuestra señora de las Angustias en Molinaseca, en las fiestas de San Froilán en León, en la romería de los Viriatos en Sayago y otras muchas localidades. Aunque parece ser una tradición que viene de la Edad Media y que se encontraba generalizada, parece ser que se ha mantenido más arraigada en las tierras que pertenecían al Reino de León. Incluso existe una asociación al respecto.
Yo los he podido ver muchas veces dado que tengo raices leonesas. Recuerdo que la primera vez fue en Bembibre en las fiestas del Cristo. Aquí era muy joven y las fotos que conservo son en diapositiva. La procesión con el Santo se produce sólo cada 7 años y se le acompaña con los pendones de muchas de las localidades cercanas. Otra de las veces que he podido ver a los pendones en la calle fue en las justas de Hospital de Órbigo. En este caso se organiza una simulación de las justas medievales y, como si nos trasladáramos a aquella época, los pendones cruzan el puente izados si el viento lo permite. El último sitio del que podréis ver fotos es Molinaseca en la procesión de nuestra señora de las Angustias. El cableado eléctrico de muchas calles hace complicado el paso de los pendones y obliga a los pendoneros a hacer la maniobra de bajar y subir el pendón en alguno de los tramos. Llevar un mástil tan alto no tiene que ser nada fácil. Espero que os gusten las fotografías que os traigo hoy de la tradición de los pendones en León.